La película protagonizada por Demi Moore y Margaret Qualley se ha convertido en una de las favoritas para los premios Oscar de este año. Aquí te contamos por qué esta cinta es toda una experiencia única.

1. Una crítica feroz
La sustancia comienza mostrando cómo la industria del entretenimiento descarta a la protagonista, Elisabeth Sparkle, una estrella de Hollywood de 50 años. Pero la película va más allá, revelando la relación conflictiva de Elisabeth con su propio cuerpo y la obsesión por mantener una imagen más joven.
2. Una reinvención (feminista) del horror corporal
Las transformaciones grotescas que sufre el personaje de Elisabeth no son aleatorias, sino que son comentarios sobre la feminidad y la mirada masculina. El director Coralie Fargeat utiliza el horror corporal como una poderosa herramienta de expresión.
3. La actuación de Demi Moore
Moore ofrece tal vez la mejor interpretación de su carrera, logrando expresar el mundo interior de su personaje de una manera cruda y vulnerable. Su actuación ha sido ampliamente elogiada y la convierte en la favorita para ganar el Oscar a Mejor Actriz.
4. Una experiencia inmersiva
Fargeat sumerge al espectador en la experiencia emocional de Elisabeth, utilizando planos cercanos y sonidos envolventes que incomodan al público.
5. Los sofisticados efectos prácticos
La sustancia apostó por efectos especiales hechos de manera práctica, en lugar de digitales. Esto le da una sensación de realismo y crudeza que se alinea perfectamente con la temática de la película.

En conjunto, estos elementos hacen de La sustancia una experiencia cinematográfica única y provocadora, que ha generado una importante conversación sobre la belleza, la juventud y la mirada de la industria sobre las mujeres.