Gracita Morales, una de las actrices cómicas más destacadas del cine español, luchó contra problemas de salud mental y estafas hasta su temprana muerte
Gracita Morales era una de esas actrices inconfundibles del cine español, cuya risa y carisma quedaron grabados en la memoria de varias generaciones. Sin embargo, detrás de esa fachada de comedia, se escondía una vida marcada por la adversidad y el sufrimiento. A 30 años de su fallecimiento, es momento de recordar la trágica historia de esta estrella cómica.
Gracita Morales
«Fue vetada porque era temperamental. Estaba enferma mentalmente, lo que le creó un estado de ansiedad que nos hacía la vida imposible a todos», llegó a escribir de ella el actor José Luis López Vázquez.
Gracita Morales, una de las actrices cómicas más prolíficas del cine español, participó en casi un centenar de películas a lo largo de su carrera, trabajando con algunos de los directores más destacados de la época. Su talento para la comedia era innegable, y su voz se convirtió en un icono del cine nacional. Desde Pedro Lazaga hasta Fernando Fernán Gómez, la lista de cineastas con los que colaboró es impresionante.
Sin embargo, su vida personal estuvo plagada de dificultades, desde su divorcio hasta problemas de salud mental que la llevaron a ser internada en una clínica psiquiátrica.
Gracita Morales y José Luis López Vázquez
«Al tomar pastillas para acostarme, pastillas para levantarme y pastillas para trabajar, estaba desequilibrada«, reconocía la actriz en una entrevista.
Una Vida Marcada por la Tragedia: Gracita Morales y sus Intentos de Suicidio
Separarse de su marido le provocó serios problemas económicos, lo que la obligó a estar siempre encadenando un proyecto con otro. Este ritmo de trabajo excesivo, sumado a su delicado estado de salud, hizo que gran parte de la industria la «vetara» por ser «temperamental» y «enferma mentalmente«. Gracita Morales llegó a estar ingresada en una clínica psiquiátrica y a intentar suicidarse en dos ocasiones. Su vida personal, marcada por la soledad y la falta de apoyo, se convirtió en una constante lucha por sobrevivir.
Incluso al final de su vida, la actriz fue víctima de una estafa por parte de unas monjas que la incitaron a firmarles documentos notariales, entre ellos la cesión de su lujoso ático en Madrid.
«Tras su muerte, fui al notario porque era la única Morales que vivía y, por tanto, su heredera (…) Me dijeron que les había dejado a unas monjitas su piso y sus derechos de imagen, que al año pueden ser de 100.000 a 200.000 euros. Se los había quedado la orden religiosa«, confesó su sobrina Ana Carvajal.
Tumba de Gracita Morales
A pesar de su talento innegable y de haber sido una de las actrices cómicas más queridas del público español, la vida de Gracita Morales estuvo marcada por la tragedia. Su historia es un recordatorio de que detrás de la fama y el éxito, a veces se esconden batallas personales que pueden ser devastadoras.
Gracita Morales nunca tuvo hijos, algo que siempre lamentó. «Siempre deseé ser madre, pero el destino quiso negarme ese don. Al principio me rebelaba, pero después acabé aceptando la realidad con muchísima filosofía. Todo mi amor lo vuelco en mi familia, en mis amigos y en una perrita que nada más verme entrar en casa mueve el rabo de alegría y me llena de cumplidos«, reveló en una ocasión la actriz.
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